Estoy lista para los dulces de Halloween, para la talla de calabazas, los preciosos colores de otoño, el pan de calabaza, muchos abrazos, capuchas y miles de cosas más.
Halloween. Espíritus, brujas, lobos, vampiros y todos aquellos seres recorren nuestras calles. Donde no hay imaginación, no hay horror. El cielo sin estrellas lamenta negro e inmóvil. Los tonos sombríos de un oscuro bosque siniestro de repente iluminados bajo la cara emergente de la luna llena. Prefiero sentarme en una calabaza, antes que ir a llenar un cojín de terciopelo pero una de las casas más cercanas me llama la atención. Se encuentra más oscura que el cielo, pero no es así para aquellos que escuchan con atención; hay un murmullo en las habitaciones de nuestro alrededor, una sobrenatural mano presiona la traba de la ventana, el pestillo se levanta. No sé escucha nada más que los aullidos de la luna, los lobos están en silencio.
Ghosts and goblins spooks galore. Scary witches at your door. Jack-o-Lanterns shining bright wishing you a haunting night.`
No hay comentarios:
Publicar un comentario